Aprovechando que tenia visita en casa me he vuelto loca, en esta casa no pueden faltar dulces mil para recibir a los invitados como se merecen jeje
Ademas cualquier excusa es buena para ponerme a hornearrrrr, que ya iba siendo hora de seguir con mi vena pastelera.
Estos bollitos son una delicia y aunque creáis que son complicados ya os digo yo ¡¡que de eso nada!!!
No sabéis lo que triunfan con un cafelito, con mermelada, chocolate o para los niños de merienda.
Espero que os gusten tanto como a mi.
Ingredientes:
550 gr harina de fuerza
170 gr leche
120 gr mantequilla
75 gr azúcar
40 gr levadura de panaderia
1 c/p sal
4 huevos
Azúcar (para decorar)
Unas de agua de azahar
Primero disolvemos la levadura en la leche tibia, añadimos la mantequilla derretida, los huevos batidos, el azúcar y la cucharadita de sal. Removemos todo bien y vamos añadiendo la harina poco a poco. Hay que amasar hasta que quede una masa lisa y homogénea, sabreis que esta lista cuando no se quede tan pegada al bol en el que la trabajéis.
La dejamos en un recipiente tapado hasta que doble su volumen, más o menos una hora.
Pasado el tiempo ponemos porciones en la bandeja de horno y dejamos levar de nuevo una media hora.
Antes de meter al horno hacemos un corte a lo largo de cada bollo, los pintamos con huevo batido y ponemos sobre ellos unos pegotes de azúcar mojada con unas gotas de azahar.
Y ya están listos para hornearrrrr, unos 10 minutos con el horno precalentado a 200º C, veréis que están listos cuando tengan color doradito.
Les podéis hacer en versión choco y meter dentro unas onzas de chocolate, se derretirá en el horno y esta uuuuummmm
Justo antes de hornear, ya pintados con el huevo y salpicados con el azúcar...esto pinta muy bien!
Recién horneados, mare miaaaaa que pintaca!
uuuum!!! que buenos...
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